Año Nuevo, Vida Nueva....este es un viejo y común dicho, cada vez que se comienza un año. Hacemos nuestras resoluciones. Hacemos planes. Fijamos metas. Hasta comenzamos dietas. Queremos cambios con el nuevo año. Como dice en el Eclesiastés, “Nada nuevo bajo el sol”, “Vanidad de Vanidades, todo es Vanidad”. Todos los años se hace lo mismo. Y por lo general el año siguiente, se hace lo mismo pues no se cumplió con nada o casi nada de lo anterior. Y así, todo es viejo y nada es nuevo.
¿Por qué será? Cuando comenzamos planes, debemos contar con Dios sobretodo para estos. Pedir su ayuda y orientación y sobretodo, saber si lo que haremos o queremos sea su voluntad. ¿Difícil? No señores…. Si tienen buena comunicación con nuestro Dios, sabrás que debe ser y que no.
El cambio que buscas puede estar en todo momento y a toda hora. No solo comenzando un año. Donde nos ponemos a repasar y ponernos sentimentales por todo y decimos “Este si será nuestro año”….. Con la ayuda de Dios todo año es nuestro año. Porque El es quien nos provee y quien nos cambia.
No importa si en el comienzo del año botas la casa por la ventana, compras todo nuevo, te cambias el cabello de color, te pones en la dieta número #300 desde que llevas tratando dietas. El cambio no llega sino desde adentro hacia fuera y el cambio solo lo da la entrega de nuestro corazón y vida al Señor Jesucristo.
No digo que comprar cosas y cambiar las que tienes sea malo. Solo digo que por ahí no comienza ese verdadero cambio que siempre queremos al repasar hacia atrás nuestras vidas. Que por lo general es al final del año. Y empezamos en esa busqueda de que saco de la casa, que pongo nuevo, que hago, que no. Pero al final, casi siempre terminamos en la misma rutina anual.
¿Quieres saber cuando llega el cambio real? El Unico y Verdadero Cambio es...en cualquier momento del año y a cualquier hora. Entrega tu corazón y vida a Jesús. Pídele que perdone tus pecados, pídele que entre en tu corazón y te transforme, entregale tu caracter, pídele que remodele tu interior, con luz nueva, con rica agua viva limpie todo lo que esta sucio en tu interior, todo lo que no debe estar que lo quite, remodélate por dentro con su amor, con su misericordia, con la sangre de Cristo limpia tus pecados, deja que El habite en tu corazón, en tu interior. Y siendo ya su casa, hará verdaderos cambios.
Entonces, VIDA NUEVA en Cristo Jesús, es la UNICA forma, y es en cualquier momento, 24 horas al día, 365 días de año, disponible para redimirte, para escucharte, para serte fiel. Para darte gozo, para orientarte, para ser tu apoyo en la hora de la prueba, para darte consuelo en el momento de dolor, para ayudarte con esas metas que te has trazado, para ayudarte con lo que realmente necesitas. Porque El conoce las peticiones de tu corazón, las que tu conoces y la que ni tu mismo conoces. Y SIEMPRE TE DA MAS Y MEJOR DE LO QUE TU MISMO PIENSAS O HAS DESEADO. Porque El es generoso Dios de amor. Y nos ama y quiere a su lado, tanto asi que dió a su único hijo por nosotros.
Así que amigo y amiga que me lees. Nunca es tarde ni es muy temprano para conocer a Cristo. Con El todo es nuevo. Y el momento es AHORA. Y mejor aun, comenzar tu nueva vida conociendo más de El, sabiendo que le agrada, que le gusta y que no, y también sirviendole, ayudandolo a través de ti, a hacer cosas hermosas.
Si deseas y de corazón quieres, repite esto en voz alta:
"Señor Jesús, creo que eres el Hijo de Dios que murió por mis pecados y resucitó. Me arrepiento de mis pecados y te pido que me perdones. Envía ahora tu Espiritu Santo a mi corazón para darme el poder de rechazar lo malo y caminar en tu voluntad. Gracias por tu amor, tu salvación y la vida nueva que me das en este día. Amén."Juan 6:47 "El que cree en mi, tiene vida eterna"
2 Corintios 5:17
“De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es: las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.”
Apocalipsis 21:5
“Y el que estaba sentado en el trono dijo: He aquí, yo hago nuevas todas las cosas. Y me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas.”
Juan 4:10
“Respondió Jesús y díjole: Si conocieses el don de Dios, y quién es el que te dice: Dame de beber: tú pedirías de él, y él te daría agua viva.”
Juan 7:38 “El que cree en mí, como dice la Escritura, ríos de agua viva correrán de su vientre.”
